¿Quién no ha oído hablar de la Toxoplasmosis?

Vamos a hablar de una de las enfermedades parasitarias más frecuentes en la geografía mundial, y que afecta tanto a animales como a personas.

La peculiaridad de esta parasitosis es que cursa, la mayor parte de las veces, de forma asintomática. Muchas de nosotras averiguamos que la hemos pasado cuando nos realizan una analítica durante el embarazo para cuantificar los anticuerpos.

El toxoplasma es un protozoo que vive dentro de una célula. Los gatos y demás felinos son claves, ya que son hospedadores definitivos de este parásito. Estos se van desarrollando en distintos estadíos de larvas y van creciendo hasta ser formas larvarias adultas, las cuales se pueden reproducir, algunas sexualmente y otras de manera asexual. En su camino del desarrollo, se van econtrando animales que les sirven para diferentes intereses para conseguir su meta que es ser adulto y reproducirse. En la meta se encuentran los felinos, en los cuales llegan a ser adultos. En ellos, se diseminan por los órganos, como el hígado, ojos, sistema nervioso, pulmones, músculos (donde se enquistan) e intestino. En este último, es donde producen ooquistes que eliminan al medio ambiente.

Nosostros, somos los hospedadores intermediarios, y este parásito nos utiliza para seguir pasando sus ciclos larvarios. Sólo pueden atacar nuestros órganos y enquistarse en nuestra musculatura, pero no pueden reproducirse y, por consiguiente, eliminar ooquistes. Nos usan de la misma manera que a un ratón, lombriz, libre, cerdo, pájaro…

Los ooquistes eliminados por los felinos al medio ambiente tardan alrededor de 5 días en ser infectivos. Son resistentes en el medio ambiente, por lo que la retirada de las heces de la bandeja de manera frecuente es sumamente importante. Las vía de infección no son los gatos, la transmisión es el mal lavado de frutas y verduras, el consumo de carne cruda o poco hecha (ya que se enquista en la musculatura de los hospedadores intermediarios que ingerimos), y la falta de higiene… El contacot directo con los gatos es poco relevante, es mucho más importante el contagio a través del medio ambiente.

Los gatos jóvenes infectados por primera vez pueden eliminar los ooquistes durante un máximo de 21 días. El contagio a través de un gato adulto es muy improbable. Los gatos se infectan porcazar y comer roedores, aves, conejos. Si presentan sintomatología, responden muy rápido a un tratamiento con un antibiótico específicico, sólo los animales inmunodeprimidos tienen problemas severos.

En el ser humano pasa igual, las personas con un sistema inmune deficiente y embarazadas pueden tener consecuencias muy graves. Se recomienda que no sean las embarazadas las que limpien los areneros, usar guantes y extremar las medidas de higiene.

Esperamos que os haya resultado interesante.

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